anita
me diste tus manos
me diste tus ojos
me diste tus cejas
somos del gen qué nace del amor
me diste tu olor a crema de rosas
y tus perfumes dulces en cantidad pomposa
a veces deseo oler de nuevo
el aroma de la comida recién hecha
que se metía por las ranuras del ascensor
cuando subía a visitarte
a mirar las noticias con vos
y a escucharte rezar a dios y maria santisima
a limarte las uñas
y maquillarte los cachetes
para que vayamos a hacer las compras
o a rezar, seguir rezando
mantener la esperanza, la felicidad
que aunque cuesta
me has enseñado anita, a mantenerla
Anita querida, mi corazón llama tu nombre
y te ama con la inocencia de una niña
el idioma de infancia es un secreto entre las dos
te amo abu querida.
Comentarios
Publicar un comentario